Querida Bea.
Bea, yo tengo por costumbre
diferenciar entre las siglas y las personas; ahora bien, cuando una
persona ostenta un cargo público de un partido y pertenece a la
dirección del mismo, tiene que tener presente que públicamente
tiene que asumir las críticas a ese partido, al margen de su postura
personal, incluso si es de lucha dentro del mismo partido. Nadie
discute que el PSOE, en unión con el PP y CIU, vendieron a los
ciudadanas, cambiando el artículo 135 de la Constitutución, y eso
los hace corresponsables de que los bancos hayan tomado el poder por
encima de las ciudadanos. El indulto a Alfredo Sáez, ya es el colmo
de ese empoderamiento bancario en contra del pueblo. Como bien decía
Ada Colau en el discurso en la Comisión Parlamentaria de la ILP de
la PAH, que era el discurso de la ciudadanía (Sociedad Civil) que es
quien tiene que tener el poder, hay una estafa de las entidades
financieras, en la que son corresponsable los partidos que la
propician y legalizan, que llega la responsabilidad criminal en el
caso de las muertes por suicidio. Esto es muy grave, y es fruto de la
aplicación de las políticas neoliberáis por parte de los partidos
de la derecha, y también del PSOE. Resolver este dilema dentro de tu
partido, no es cuestión de personas si no de programas, en los que
claramente se decida apostar por una economía marxista, de claro
componente social, que se una a la lucha de los trabajadores y de los
parias de nuestra sociedad (enfrentándose con claridad al poder de
la banca) En tanto esto no ocurre a los militantes del PSOE, no les
queda otra que aguantar el rechazo público manifiesto e incluso
subido de tono.
Esta realidad no se puede tapar, y
cualquiera la puede expresar. Que ex ministros abandonen una
manifestación donde estorban, por la presión de la ciudadanía
indignada, es normal mientras, no rectifiquen. Tu misma, Bea,
marchaste de una concentración contra los deshaucios, en la plaza
del Ayuntamiento de Ferrol, después de la lectura del manifiesto,
supongo que llena de vergüenza; tan sólo Celso tomó la palabra, a
micrófono abierto, para disculpar la actitud del PSOE.
Alexandre,
Bea, es uno de los nuestros; que las formas, que mí me parecen
satíricas y ajustadas, no sean vistas así por Martín y Ocampo es
normal, que lo digan estos compañeros también. Ahora, eso no puede
tapar la realidad y las responsabilidades de un Partido. A luchar,
Bea, y si no consigues que el partido cambie, pues ya sabes: no lo
representes.