Pienso que hay que dejar pasar algunos años para analizar a Zapatero y poder tener realmente su valoración como presidente de Gobierno del estado español. Es cierto que cambió de la sociedad plural a la singular; también es cierto que se doblegó a las exigencias de Europa, de los banqueros, de los empresarios, incluso contradiciendo muchas cosas de su discurso inicial y del ideario de su partido. Ahora bien, si de verdad queréis, chavales, un mundo sin mercado ni capitalismo, sin empresas en el que "el lucro del empresario" es legalmente su objetivo, hay que ponerse a trabajar ya, y dejarse de cuentos. Hay que renunciar al fraude para llenar la panza y olvidar el consumo masivo de cosas que no tienen la menor importancia en la vida del ser humano. Luchar, ahorrar recursos de la naturaleza, aprovechar y reparar todo lo construido y fabricado hasta agotarlo, renunciar a lo que se llama moda, en definitiva: seguir una economía de producción programada y de decrecimiento. Para los que no estén dispuestos a renunciar a eso, desde luego Zapatero fue el mejor presidente posible.
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